El confort ha sido una de las prioridades de Citroën durante casi un siglo, hasta el punto en que 'Comfort Citroën' se ha convertido en una auténtica firma de la marca francesa. Con el tiempo, la definición de confort ha sufrido profundos cambios, y hoy engloba los más variados criterios.
Con el fin de adoptar el enfoque más avanzado y completo del confort, como anunciamos ayer, Citroën ha lanzado el concepto “Citroën Advanced Comfort”. Un concepto ilustrado a través del “Citroën Advanced Comfort Lab”, un prototipo basado en el C4 Cactus que reúne tecnologías como suspensiones con topes hidráulicos progresivos, nuevos asientos y un proceso de unión estructural sin precedentes.
Cuando un vehículo pasa por una deformación en el piso, la repercusión de esta perturbación se transmite a los ocupantes en tres etapas: trabajo de suspensión, repercusión de las vibraciones en la carrocería y el paso de vibraciones a los ocupantes a través de los asientos.
En este sentido, el prototipo presenta tres innovaciones (ver aquí), uno por cada uno de los vectores, lo que permitirá la reducción de las molestias sentidas por los ocupantes, y así mejorar significativamente el confort en marcha.
Estas tecnologías supusieron el registro de más de 30 patentes, pero su desarrollo tuvo en cuenta su aplicación, tanto económica como industrial, a la gama de modelos de la gama Citroën. Dicho esto, entremos en los detalles de la nueva suspensión de la marca francesa, la innovación más importante de las tres que ahora se presentan.
Suspensiones con topes hidráulicos progresivos
Una suspensión clásica se compone de un amortiguador, un resorte y un tope mecánico; el sistema Citroën, por otro lado, tiene dos topes hidráulicos, uno para extensión y otro para compresión, en ambos lados. Así, se puede decir que la suspensión funciona en dos etapas, dependiendo de las solicitudes:
- En las fases de ligera compresión y extensión, el muelle y el amortiguador controlan conjuntamente los movimientos verticales sin necesidad de los topes hidráulicos. Sin embargo, la presencia de estos topes permitió a los ingenieros ofrecer un mayor rango de articulación al vehículo, en busca de un efecto alfombra voladora, dando la sensación de que el vehículo está volando sobre las deformaciones del piso;
- En las fases de compresión y extensión acentuadas, el control de muelle y amortiguador junto con los topes de compresión o extensión hidráulica, ralentizan progresivamente el movimiento, evitando así la parada brusca que suele producirse al final del recorrido de la suspensión. A diferencia de un tope mecánico tradicional, que absorbe energía pero devuelve una parte de ella, el tope hidráulico absorbe y disipa esa misma energía. Por tanto, el fenómeno conocido como rebote (movimiento de recuperación de la suspensión) ya no existe.
