El primer MINI apareció en 1959, y su logo distaba mucho de lo que conocemos hoy. Los modelos Morris Mini-Minor y Astin Seven, producidos por la British Motor Corporation (BMC), fueron los primeros en salir de la línea de producción, pero el icono británico estuvo en el mercado hasta el año 2000, cuando el grupo BMW adquirió la marca y puso en marcha el proceso de evolución del MINI tal como lo conocemos hoy.
El primer logotipo de la marca Morris estuvo representado por un buey rojo y tres olas azules - el símbolo de la ciudad de Oxford - que apareció dentro de un círculo con dos alas estilizadas a la izquierda y a la derecha.
En contraste, el Austin Mini, que apareció a partir de 1962 en adelante, exhibía un logo hexagonal sobre la parrilla del radiador, mostrando la inscripción y el emblema de la marca.
A partir de 1969, cuando empezó a producirse exclusivamente en la fábrica de Longbridge en Reino Unido, recibió por primera vez la designación Mini, con un emblema clásico de diseño abstracto que no tenía parecido con los símbolos originales. El llamado Mini escudo se mantuvo en uso durante décadas, adaptándose su diseño varias veces.
En 1990, una nueva generación de Mini recibió una vez más un nuevo logotipo, volviendo al diseño tradicional y centrándose en los méritos deportivos logrados hasta ahora. Apareció una rueda cromada con alas estilizadas en lugar del buey y las olas, y apareció la inscripción roja “MINI COOPER” con una corona verde sobre fondo blanco.
En 1996, esta variante se aplicó a los otros modelos con un fondo modificado y la inscripción "MINI".
Solo unos años más tarde, durante los preparativos para el relanzamiento de la marca, que ahora es propiedad de BMW Group, el diseño del logotipo utilizado más recientemente para el Mini clásico se tomó como base y se modernizó constantemente. El MINI moderno apareció con un logotipo de diseño tridimensional con la inscripción de la marca en blanco sobre un fondo negro. El círculo cromado y las alas estilizadas se han mantenido sin cambios durante casi 15 años y han hecho que el símbolo sea familiar en todo el mundo.
Por lo tanto, el nuevo logotipo pretende resaltar elementos estilísticos de la etapa inicial del clásico Mini con un aspecto orientado al futuro.
La nueva interpretación del logotipo adopta la forma de un diseño reducido que se centra en lo esencial sin dejar de ser familiar, con letras mayúsculas en el centro. Se basa en el estilo de representación tridimensional que ha existido desde el relanzamiento de la marca en 2001, aplicándolo a una forma de expresión visual conocida como “diseño plano” que integra los principales elementos gráficos.
El nuevo logo de MINI es más simple y claro, abandona los tonos grises y se concentra solo en el blanco y negro, con la intención de demostrar la claridad de la nueva identidad de la marca y su carácter, reflejando así una clara apuesta por la tradición de la marca británica, que ahora se extiende por casi 60 años. Estará presente en todos los modelos MINI de marzo de 2018 , que aparece en el capó, la parte trasera, el volante y el control de llave.
