Audi da un nuevo paso en la producción de combustibles sintéticos neutros en CO2. Con la apertura de una planta piloto en Alemania, en Dresden-Reick, la marca anillo producirá 160 litros de “Crudo Azul” por día utilizando agua, CO2 y electricidad verde.
La planta piloto fue inaugurada el viernes pasado y ahora se prepara para producir “Crudo Azul”, con el 50% del material producido que se puede transformar en diesel sintético. “Blue Crude”, libre de azufre y aromáticos, es rico en cetano, lo que significa que es altamente inflamable.
Las propiedades químicas de este combustible permiten su mezcla con diesel fósil, lo que permite su uso como combustible drop-in. La incursión de Audi en los combustibles electrónicos comenzó en 2009 con e-gas: el Audi A3 g-tron puede alimentarse con metano sintético, producido en Baja Sajonia, en Werlte, en la planta de e-gas de Audi.
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Dos tecnologías, dos asociaciones
En asociación con Climaworks y Sunfire, Audi y sus socios pretenden demostrar que la industrialización de los combustibles electrónicos es posible. El proyecto, cofinanciado por el Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania, fue precedido por dos años y medio de investigación y desarrollo.
El CO2 se extrae del aire ambiente, seguido del proceso de "energía a líquido", que se introduce en el proceso a través de Sunfire. Pero, ¿cómo se produce?