El Opel Mokka X se presentó en Ginebra con un rostro fresco y más aventurero que nunca.
El Opel Mokka X se distingue de la versión anterior por los cambios en la parrilla horizontal, que ahora tiene forma de ala, con un diseño más elaborado, renunciando a algunos plásticos presentes en la generación anterior y luces diurnas LED que acompañan al nuevo. "Ala" hacia adelante. Las luces LED traseras (opcionales) sufrieron pequeños cambios estéticos, siguiendo así la dinámica de las luces delanteras. Se ha ampliado la gama de colores del chasis, ofreciendo ahora la opción de elegir entre Naranja Ámbar y Rojo Absoluto.NO TE LO PIERDAS: Una especie de "apartamento de lujo" con más de 600hp
La letra “X” es la representación del sistema de tracción integral adaptativa que envía el par máximo al eje delantero o hace una división 50/50 entre los dos ejes, dependiendo de las condiciones del piso. Opel, utilizando esta nomenclatura, quiso transmitir un espíritu más aventurero y atrevido.
Dentro del crossover, encontramos una cabina heredada del Opel Astra, con una pantalla táctil de siete (u ocho) pulgadas, más simple y con menos botones, muchas de las funciones ahora están integradas en la pantalla táctil. El Mokka X cuenta con los sistemas OnStar e IntelliLink, lo que lleva a la marca alemana a afirmar que será el crossover compacto más conectado del segmento.
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Tras haber vendido más de medio millón de unidades en Europa, la marca alemana está decidida a dar no solo una nueva imagen al Opel Mokka X, sino también un nuevo motor: un 1.4 turbo de gasolina capaz de entregar 152 CV heredado del Astra. Sin embargo, la "empresa estrella" en el mercado nacional seguirá siendo el motor 1.6 CDTI.
