El crimen tuvo lugar en China, cuando un Volkswagen Touareg no pudo resistir las curvas de un Porsche 911 con una provocadora cubierta roja. Podría enfrentar una pena de hasta 10 años en el taller.
Como si la infracción fuera poco, Porsche y Volkswagen son marcas hermanas por lo que estamos ante una infracción incestuosa. Según Car News China, el crimen se cometió en un estacionamiento oscuro, frente a los incrédulos faros de varios autos. Que a menudo hicieron poco frente a la fuerza motriz del Volkswagen Touareg y su sistema de tracción 4Motion. Un Renault Twingo intentó degradar, sin éxito, al Volkswagen Touareg…
El Porsche 911 estaba apoyado contra la pared, medio cubierto por una cubierta roja. Se dice que fue la ignición que desencadenó el comportamiento sexual del SUV alemán. O eso, o fue solo un conductor chino que confundió el pedal del acelerador con el freno… dicen. Pero sigamos con la primera versión, ¿de acuerdo?
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