La transmisión manual, la tracción trasera, el chasis muy equilibrado, el motor atmosférico y la potencia generosa (vale, podría ser un poco más generosa ...) hacen del deportivo japonés una máquina accesible que es relativamente fácil de explorar al límite.
Sabiendo esto, el periodista sudafricano Jesse Adams se propuso poner a prueba las habilidades dinámicas del Toyota GT86, y sus propias habilidades como piloto, en un intento de batir el récord Guinness de la deriva más larga de la historia.
El récord anterior lo ostentaba el alemán Harald Müller desde 2014, que al volante de un Toyota GT86 logró recorrer 144 km de lado… literalmente. Un récord impresionante, sin duda, pero este lunes acabó siendo batido por un amplio margen.
En Gerotek, un centro de pruebas en Sudáfrica, Jesse Adams no solo logró superar los 144 km, sino que también alcanzó los 168,5 km, siempre en deriva, durante 5 horas y 46 minutos. Adams completó un total de 952 vueltas al circuito, a una velocidad media de 29 km / h.
Con la excepción de un tanque de combustible adicional, ubicado en el área de la llanta de refacción, el Toyota GT86 utilizado para este récord no ha sufrido ninguna modificación. Al igual que con el récord anterior, la pista estaba constantemente mojada; de lo contrario, los neumáticos no aguantarían.
Todos los datos se recopilaron a través de dos registradores de datos (GPS) y se enviaron a Guinness World Records. Si se confirma, Jesse Adams y este Toyota GT86 son los nuevos poseedores del récord de la deriva más larga de la historia. Cuando se trata de la deriva más rápida del mundo, nadie puede vencer al Nissan GT-R ...
