Un automóvil no hace el motor, pero el motor puede hacer el automóvil. Puede que no esté de acuerdo, pero así es. Y los 15 mejores motores, al menos los que elegimos, marcaron definitiva y eternamente los coches que los equipaban. Eran una gran parte de su razón de ser, de su atracción.
¿Qué sería del Honda S2000 sin su atmosférico cuatro cilindros capaz de 9000 rpm? ¿O el Impreza sin Boxer? ¿Y necesito hacer referencia a las letras 2JZ-GTE?
La década de los 90 merece ser recordada por todas las razones y más, pero hoy recordemos los motores que consideramos han sido la cúspide de la década. Una década en la que se empezó a tomar mucho más en serio el control de emisiones y la electrónica invadió definitivamente los motores. Pero también, una década en la que la sobrealimentación seguía siendo sinónimo de rendimiento puro y el motor de aspiración natural alcanzaba niveles de rendimiento excelentes.
Estos ejemplos son joyas puramente mecánicas, generalmente asociadas con máquinas que también son especiales; eso es lo que sucede cuando dejamos sueltos a los ingenieros. Destaca la variedad de soluciones: de cuatro a 12 cilindros, atmosférica y turbo, y de tres nacionalidades: japonesa, alemana e italiana.
Podríamos ampliar la lista a más motores, pero era necesario establecer un límite. Lo que significó dejar de lado ejemplos fantásticos, como algunos V12 italianos o V8 estadounidenses, pero al final, estos 15 seleccionados resumen la calidad y diversidad de lo que marcó la última década del siglo XX.
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