Después de cubrir varios tipos de terreno durante 100.000 kilómetros tortuosos, SEAT decidió dar a conocer los resultados de una prueba de resistencia y fiabilidad al SEAT Ateca.
Las expectativas de los técnicos de SEAT eran relativamente altas, “después de 100.000 km, el vehículo debería responder como un vehículo nuevo”, afirma José Luis Duran, Ingeniero de Desarrollo del Centro Técnico de SEAT.
Independientemente de las condiciones climáticas y del tipo de uso, los automóviles están diseñados para pasar pruebas como estas.
100 000 km y 4000 piezas
En el vídeo podemos ver la transformación del SEAT Ateca en un puzzle de 4000 piezas. Un rompecabezas que sirvió para comprobar el estado y posible desgaste de miles de componentes.
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En la revisión de las 4000 piezas del coche, el equipo prestó especial atención a los detalles: lubricación del motor, posible entrada de polvo, espacios estancos, etc. Cada pieza tiene diferentes especificaciones, tolerancias de frío, calor y uso, y debe poder resistir la expansión y la contracción.
Para llegar a este inusual collage de piezas, los ingenieros pasaron día y medio desmantelando el coche y analizando las piezas una a una.