En cualquier coche, donde nunca debemos ahorrar es en las conexiones al suelo, es decir, neumáticos, suspensión y, por supuesto, frenos. Son la primera línea de defensa para nuestra seguridad y la de otros automovilistas en la carretera.
Fiel a su constante compromiso con la seguridad, Mercedes-Benz estrenó un cortometraje que demuestra precisamente el valor de sus piezas originales en relación con las falsificadas, a primera vista similares a las originales, más baratas, pero con un rendimiento claramente inferior.
más barato se vuelve más caro
En la película podemos ver dos CLA de Mercedes-Benz, uno equipado con discos y pastillas de la marca y el otro con discos y pastillas falsificados. Y se hace evidente, en las pruebas realizadas, que a pesar de que los frenos falsificados son visualmente idénticos a los originales, se convierten en una amenaza para nuestra seguridad y la de los demás cuando realmente necesitamos toda la capacidad del sistema de frenado.Es un caso claro donde el ahorro económico en la adquisición de material puede resultar caro, ya que no somos capaces de detenernos a tiempo para esquivar el obstáculo que tenemos por delante.
¿Tienen que ser siempre piezas originales?
Por supuesto, Mercedes-Benz siempre promoverá la compra de sus repuestos originales, pero no tiene por qué hacerlo. Aunque el vídeo intenta disuadirnos de equipar nuestro coche con componentes de otros fabricantes, sabemos que el mercado ofrece componentes equivalentes o mejores que los equipos originales de los fabricantes y, en general, más asequibles.
Al igual que con todo lo demás, es una buena idea tomar una decisión informada: son componentes esenciales para la seguridad del automóvil, a veces con solo unos clics de distancia.