Tras una primera prueba con Ducati a través de una joint-venture, Mercedes-AMG vuelve a la carga en el mercado de las dos ruedas con la adquisición del 25% de MV Agusta.
Parece que salir con la industria de las 'dos ruedas' es la gran nueva tendencia para las marcas premium alemanas. En este momento, Audi, BMW y Mercedes tienen sus "brazos armados" en la industria de las motocicletas.
BMW es el que tiene más tradición en esta industria: antes de que BMW produjera automóviles, ya producía motocicletas. Audi, a su vez, adquirió en 2012 Ducati, una de las marcas de motocicletas más conocidas del mundo.
Recordamos que durante más de dos años, Razão Automóvel anticipó el deseo de Daimler de adquirir una marca de motocicletas. Teníamos razón. Aquí Mercedes-AMG sigue el mismo camino que sus competidores, adquiriendo el 25% de MV Agusta y firmando un acuerdo de cooperación que permitirá a las dos marcas crear sinergias en ventas y marketing. No se reveló información sobre los montos involucrados en esta operación, pero Mercedes-AMG nombrará en breve a un miembro del directorio de MV Agusta.
Relativamente desconocido para el público en general, MV Agusta es una de las casas de motocicletas italianas más reconocidas. Reconocida mundialmente por su exclusividad, diseño y altas soluciones técnicas, esta marca renació en 2006 con el lanzamiento de la MV Agusta F4. Una superbike desarrollada por el incomparable genio de Massimo Tamburini y una de las motocicletas más bellas de la historia, en un paquete de detalles soberbios que parecen inmunes al paso del tiempo.
Según Tobias Moers, CEO de Mercedes-AMG: “En MV Agusta hemos encontrado el socio perfecto de dos ruedas para Mercedes-AMG. Este fabricante tiene una larga tradición y, al igual que Mercedes-AMG, compartimos no solo una exitosa trayectoria en competición, sino también en valores y metas para el futuro. Creemos que esta cooperación permitirá trasladar nuestra experiencia, nuestro desempeño y la tecnología utilizada en la alta competencia a las carreteras ”.
Para aquellos a los que les gustan las notas históricas, sepan que fue mientras conducía un MV Agusta que Giacomo Agostini se coronó como el piloto de velocidad más victorioso de la historia, obteniendo 122 victorias a lo largo de su carrera. El piloto más cercano a ese récord es Valentino Rossi, con 106 victorias.
